Hoy vengo con la conocida La Trappe, en este caso Dubbel, que he probado al fin pero que tampoco me ha parecido algo excepcional. Aún así, y todo hay que decirlo, esta trapense, la única holandesa (según dice la propia marca), cumple con varios requisitos importantes: buena presentación en su envase, aspecto suculento y un buen sabor.
Me recuerda bastante a la Leffe Brune, aunque no es tan tostada ni tan intensa, con graduación alta (7º). Venta en caja de 4 botellines con la bonita etiqueta y con una copa también elegante.
Le pongo un 3 sobre 5, aunque la esperaba mejor. ¡Saludos!